A veces existe la creencia (por otra parte tranquilizadora) de que el problema es del otro.
Pero lo que se ha evidenciado es que, aunque un problema afecte a uno en particular, a menudo suele estar mantenido por el resto de la familia.
No sólo en problemas de relación de pareja, sino en otros aparentemente más atribuidos a un miembro de la familia (problemas de atención con hiperactividad, enurésis, fobias, problemas escolares…) procuramos atender a cuantos miembros de la familia se quieran implicar, porque en muchos casos cuantos más agentes intervengan en la resolución de un problema mejor pronóstico tendrá.
En kercus estamos preparados para atender:
- Problemas de relación padres-hijos
- Problemas de pareja
- Dificultades de convivencia